Seat necesita recuperar el liderazgo en el mercado español para recuperar la credibilidad de su accionista Volkswagen. La firma alemana exige a su filial que sea fuerte en su mercado doméstico para comprometerse a realizar nuevas inversiones en la planta de Martorell (Barcelona).
Seat ha pedido a Volkswagen fabricar y comercializar un nuevo todo terreno urbano (SUV), pero la multinacional que preside Martín Winterkorn espera noticias positivas del mercado español antes de decidir si el nuevo coche se produce en Martorell o en las plantas europeas de Skoda que también tienen bajos niveles de ocupación.
Para conseguir recuperar el liderazgo, Seat acaba de presentar en el Salón del Automóvil de Ginebra el nuevo León tres puertas, un coche que la firma española reclamaba desde hacía más de diez años y que compite directamente con el Golf de VW. "Quiero ser líder en el segmento del Ibiza, en el del León y en el del Toledo", asegura el nuevo director general de Seat España, Mikel Palomera. La suma de estos tres liderazgos garantizaría a Seat el liderazgo del mercado español. Palomera asegura que no le obsesiona el liderazgo y que lo importante "es que nuestros concesionarios recuperan la rentabilidad", pero lo cierto es que su antecesor Vicente Adrian fue sustituido cuando perdió el liderazgo del mercado tras lograrlo en 2010 y 2011.
SEAT vendió el año pasado 56.000 unidades en España, que pasó a ser el segundo mercado después Alemania, donde vendieron más de 60.000 unidades. De hecho, la compañía ampliará su red de concesionarios en Alemania con 40 aperturas, mientras sigue recortando su red en España.
La cruda realidad
El presidente de Seat, James Muir, ha anunciado que Seat completará su gama con nuevos productos que presentaran en otoño, en el Salón de Frankfurt. El nuevo producto es un Leon familiar, pero también podría anunciarse la fabricación del todo terreno urbano tan deseado.
El presidente del comité e empresa de Seat, Matías Carnero, explicó en su visita a Ginebra que VW debe apostar por su filial española "en marca y en volumen de producción" y para es necesario que "anuncien ya los nuevos proyectos" en referencia al todo terreno urbano.
Por el momento, Seat ha empezado a no renovar los contratos de 400 empleos temporales y la dirección está negociando con los trabajadores un aumento de la flexibilidad de la factoría de Martorell. Tras el cierre de un turno de producción del Ibiza, Carnero teme que la producción de Martorell no llegue a las 385.000 unidades de 2012, lo que podría provocar nuevos excedentes de plantilla.
El economista.
