Vistas las últimas declaraciones de James Muir, parece claro que se va a buscar un reposicionamiento a la “baja” de la marca, abandonando en parte el espíritu más prestacional y reenfocándose hacia algo más neutro, para intentar convencer a un espectro de público más amplio.
Desveladas las nuevas intenciones, el punto de partida y también objetivo, son las generalistas francesas. Tradicionalmente, tanto Renault, Peugeot como Citroën, han ofrecido un menú para todos los gustos, abarcando en nuestro continente unas de las ofertas más completas.
En el caso que hoy nos ocupa, Renault, en nuestro país podría ser considerada, en lo que a ventas se refiere, como la eterna rival de Seat y en el exterior, no nos equivocamos al decir que es una de las firmas más reconocidas a nivel mundial.
Obviando que sus últimos diseños puedan gustar más o menos, es bien cierto que su gama es una de las más completas y comparándola con la de Seat, veremos que está presente en varios segmentos en los que la española no lo hace. Sin embargo, parece ser que esta situación va a cambiar en años venideros.
A sabiendas de que las comparaciones son odiosas, vamos a pasar a analizar ambas gamas. En el segmento A encontramos el Twingo, un modelo que va por su segunda generación y que acaba de sufrir un severo restyling. En apariencia, tiene más éxito en su país natal que en el resto del mundo, pero siendo sus cifras más bajas que las del original, siguen siendo muy destacables. Seat, por su parte, va a ponerle las cosas difíciles con el Mii. El Twingo tiene una variante de nicho, el Wind, que es una especie de cabrio/barchetta, que con toda seguridad no tendrá concurrente en Seat.
Los Clio rivalizan con los Ibiza. Grandes conocidos por el gran público, en cuanto a ventas el español gana en el mercado nacional y el galo en el resto de Europa. En sus últimas generaciones coinciden en tipos de carrocería y mantienen una lucha encarnizada en la parte alta de la gama con las versiones “Sport”.
En medio de los Twingo y Clio, queda el extraño Modus, una especie de monovolumen mínimo, que no ha tenido mucha aceptación dada su estética. Esto se intentó paliar añadiendo una carrocería alargada (práctica muy utilizada por Renault) y una suavización de sus líneas. Seat pretende hacerle frente a través del Mii de 5 puertas a partir del año que viene.
El punto fuerte de Renault, es el Mégane. Este modelo que acumula el grueso de las ventas de la firma, cuenta con multitud de carrocerías y la suma de todas ellas lo colocan en el primer puesto en el acumulado del año en nuestro país. Así mismo, a nivel europeo se cuela en el top ten de ventas. Tres de sus variantes, Fluence, Scenic y Grand Scenic, se disgregan por nombre de la gama pero mantienen la misma base mecánica. El tandem León /Altea de Seat luchan en desventaja pues hay varios nichos en los que los españoles están ausentes. Con la llegada del León 3 y Toledo 4, se van a tapar varios agujeros y solo queda pendiente saber si los Altea continuarán en catálogo.
Las berlinas medias y altas de Renault dominaron el mercado europeo con mano dura en el pasado, pero con el auge de la marcas premium alemanas pasaron a un segundo plano. En nuestro país, el diseño de las últimas generaciones del Laguna, le acabó pasando también factura y la firma gala respondió sacando una variante de 4 puertas con más porte, el Latitude. Para entonces el Exeo había irrumpido con fuerza en el mercado español y a pesar de la larga ausencia de Seat en el segmento, el público sigue respaldando la apuesta de la filial de Volkswagen.
El que fuera pionero de los monovolumenes en Europa, el Éspace, se comercializa de dos formatos, corto y largo. Ambos se enfrentan al Alhambra de segunda generación, con el que mantienen una dura rivalidad a nivel europeo. Se puede decir, que es el único segmento donde Seat le planta cara (fuera de España) a su contrincante francés.
Fuera del mapa queda el Koleos, un SUV de estética muy personal, que según las últimas declaraciones de James Muir, terminará teniendo un oponente en Seat.
Y por último, cabe mencionar la ofensiva eléctrica de ambas, que están dando su primeros pasos, y habrá que esperar a ver como reaccionan los mercados ante sus diferentes ofertas.
En definitiva, parece que la visión del presidente de Seat se aproxima bastante a una gama como la de la casa de Billancourt y esperemos que esa fórmula termine dando resultados. Vosotros que opináis?