40,000 portátiles trabajando al unísono. Esta es la capacidad del superordenador MareNostrum 4. Es el más potente de España, el séptimo de Europa y está en Barcelona, en el Barcelona Supercomputing Center - Centro Nacional de Supercomputación (BSC). Esta potencia le permite realizar toda clase de simulaciones: desde cómo funciona un corazón hasta predicciones sobre el cambio climático, pasando por catástrofes ambientales. En el caso del proyecto de colaboración con SEAT, se busca aprovechar la potencia de cálculo del MareNostrum, 165.888 procesadores al servicio de nuestros coches.
6.912 chips en una capilla: El MareNostrum 4 se encuentra en una antigua capilla desacralizada del Campus Norte de la Universidad Politécnica de Cataluña, a 24 grados de temperatura y una humedad del 36%. Oriol Lehmkuhl, investigador del BSC en modelos físicos y numéricos, es uno de los cientos de investigadores que utilizan desde cualquier parte del mundo este supercomputador para sus estudios: “En mi campo estudio las cámaras combustión de aviones, simulaciones de parques eólicos y, en el caso de la colaboración con SEAT, cómo es la aerodinámica de las llantas de sus coches”.