Investigadores de la KTH (Real Academia Sueca de las Ciencias) desarrollan materiales termoeléctricos que convierten el calor en electricidad.
En los coches de hoy en día, una gran cantidad de combustible se pierde en forma de pérdidas de calor. Muchos fabricantes de automóviles están por lo tanto inmersos en el desarrollo de los materiales termoeléctricos para poder, por ejemplo, ser utilizado para cargar la batería de coche.
Los materiales termoeléctricos han sido utilizados para proveer energía en diversas aplicaciones de nicho. Pero hasta ahora, los materiales no eran suficientemente eficaces como para ser práctico en los automóviles. Ahora, intentan conseguir una mayor eficacia en este ámbito y colaboran En el proyecto, Volkswagen, Seat y Siemens.
SEAT probará un módulo que recupera el calor en el tubo de escape, en un coche de gasolina, y un prototipo de un híbrido, y comprobar así su eficacia, aunque todavía no existen fechas.
Los científicos usan un mineral de cobalto-antimonio con un nombre extraño: skutterudit.