La policía italiana apuesta por el SEAT León.


SEAT se ha adjudicado el contrato para el suministro de unidades del León a las fuerzas del orden italianas, la Polizia di Stato y los Carabinieri. Los primeros 206 vehículos se han empezado a entregar este viernes en Verona, 106 a los Carabinieri y otros 100 a la Polizia di Stato. En su conjunto, el acuerdo prevé la opción de adquirir hasta 4.000 unidades durante los próximos tres años. Por el momento, se han recibido 925 pedidos, 475 “panteras” (Polizia di Stato) y 450 “gacelas” (Carabinieri). 

Se trata de la primera vez que ambos cuerpos de seguridad italianos han adjudicado un contrato a la misma marca y al mismo modelo. Los principales factores que han llevado a esta decisión son unos reducidos niveles de consumo y emisiones, además de la alta calidad y el excelente coste total de uso, todos ellos valores en los que destaca SEAT. 


“Es un honor que la policía italiana confíe en SEAT y en el León. Y nos enorgullece poder contribuir a la seguridad ciudadana con unos vehículos fiables, seguros y de máxima calidad”, ha afirmado el presidente del Comité Ejecutivo de SEAT, Jürgen Stackmann. “Este acuerdo también es un excelente ejemplo del gran éxito y crecimiento de la marca SEAT en el canal de flotas”.


En 2014, SEAT aumentó un 33% la comercialización de vehículos de flotas a empresas hasta alcanzar las 68.900 unidades, lo que contribuyó de manera importante al crecimiento de las ventas globales de la compañía en un 10% registrado el año pasado. La clave del éxito se explica en la familia del León, en especial el León ST con carrocería familiar, altamente valorado como vehículo de flota. El incremento de las ventas de SEAT en el canal de flotas se produjo principalmente en los grandes mercados europeos como Alemania, España, Reino Unido, Francia e Italia. 

El empleo de blindaje aumenta la seguridad

El vehículo destinado a la policía italiana es el León cinco puertas equipado con el deportivo motor 2.0 TDI de 150 CV (110 kW). El nuevo coche policial también necesita mucha potencia de tracción y elevado par motor porque el frontal del León está blindado para protegerse de los disparos de armas pequeñas. 

El equipamiento también incluye neumáticos especiales con reglajes de suspensión adaptados a las necesidades policiales. Los vehículos se completan con, entre otros elementos, luces de alarma y advertencia, un equipo de radio y comunicaciones y soluciones para el transporte de armas. El asiento trasero se presenta como una “celda de detención” y los agentes de policía se sientan delante, con el habitáculo dividido en dos por una mampara de seguridad.

Pruebas de resistencia realizadas con “panteras” y “gacelas”

Los exhaustivos ensayos de prototipos se han realizado con dos vehículos cuyos nombres en clave son “gacela” y “pantera” y una batería completa de pruebas de resistencia garantizará el rendimiento de los vehículos, que tendrán que soportar unas condiciones especialmente duras durante su uso diario. Por ejemplo, una prueba consistía en someter la puerta blindada a 100.000 operaciones de apertura y cierre. Ambos vehículos rodaron, además, de manera continua un total de 30.000 kilómetros, con paradas únicamente para repostar y relevar a los conductores. 

Los vehículos se fabrican en la planta de SEAT en Martorell y posteriormente se envían a Chivasso (Italia), donde reciben adaptaciones específicas en las instalaciones de la empresa N.C.T.: Nuova Carrozzeria Torinese, que se dedica a transformar la mayoría de la flota italiana de coches policiales desde 2003. Este proceso recibe el apoyo de expertos de SEAT y del Grupo Volkswagen en Italia.