Tras la gran acogida a nivel mundial de la cuarta generación del León, el responsable de Coches Históricos de SEAT, Isidre López, repasa los 21 años de historia y las claves del éxito de uno de los pilares de la marca.
¿Qué representa el León para SEAT?
Con el lanzamiento de la primera generación, en 1999, SEAT irrumpe con fuerza en uno de los segmentos más importantes, el de los compactos. La marca se sitúa así en el mapa mundial de la automoción. Actualmente, el León es el modelo más vendido de la compañía, y en toda la historia de SEAT solo está por detrás del Ibiza, que cuenta con 15 años más de recorrido, en número de ventas.
¿Cuáles son las claves de su éxito?
Sobre todo, el compromiso que siempre ha mantenido con la calidad y el diseño. En cada una de sus generaciones, se ha utilizado la máxima tecnología a nuestro alcance y eso ha contribuido a crear no solo una personalidad característica, sino también un coche de gran calidad. Siempre a la vanguardia, pero a su vez manteniendo, a lo largo de sus 21 años de recorrido, un mismo ADN mediterráneo y deportivo que lo diferencia de sus competidores y lo hace capaz de enamorar desde al público más joven al más maduro. Es un coche ampliamente aceptado por los usuarios, el boca-oreja ha jugado un papel esencial. Eso es debido en gran medida a sus virtudes dinámicas que lo han convertido en un referente en su segmento a lo largo de todo su recorrido.
¿Qué ha aportado cada una de las generaciones?
La primera generación significó el primer voto de confianza del grupo Volkswagen para que SEAT abanderara la tecnología. Fue el primer modelo de SEAT con una potencia de 180 caballos, con transmisión integral de cuatro ruedas y cambio de seis marchas. Con la segunda, llega la línea dinámica del lateral, tan característica del León. Además, incorpora por primera vez la dirección asistida electromecánica y elementos de seguridad activa. En cuanto a la tercera generación, fue el primer modelo del segmento con luces full LED. El diseño de sus faros frontales le aportan una personalidad tal que cualquier conductor es capaz de reconocerlo a metros de distancia.
Y ahora es el turno de la cuarta generación. ¿Cuáles son sus principales aportaciones?
Es un coche que se ha superado a sí mismo, y era todo un reto, ya que en mi opinión siempre ha sido uno de los mejores diseños de SEAT. Además, la tecnología en materia de seguridad y emisiones lo convierten en un vehículo, me atrevería a decir, adelantado a su tiempo.
La cuarta generación del León es el resultado de 21 años de evolución de uno de los pilares de SEAT. Desde ese primer modelo de 1999 hasta ahora, el León ha avanzado al son de las últimas tecnologías manteniendo su personalidad. Por encima de todo destacaría sus aptitudes dinámicas. En su lanzamiento fue una gran ventaja y hoy lo sigue siendo, incluso con más precisión. Un coche hecho para los amantes de la conducción.
Ahora, se presenta como un ejemplo de innovación en el sector del automóvil: es el primer vehículo de la compañía totalmente conectado; el más seguro, equipado con control de crucero adaptativo predictivo y asistente de emergencia 3.0, y por primera vez cuenta con un sistema de iluminación Full LED que recorre todo el ancho de la carrocería.
