Ya hemos comentado más de una vez que el famoso acabado FR de SEAT ha terminado por convertirse en un acabado más. Lejos quedó ese toque de exclusividad y deportividad, muy por encima del resto de acabados; con permiso de los cupra, claro está.
SEAT comenzó a incorporar motores más pequeños en la gama y eso hizo que muchos usuarios no lo aceptaran con tal acabado, acostumbrados a ofrecer un coche más radical.
Sin embargo, a dia de hoy, la marca española sigue con la idea de incluir motores todavía menos potentes, como es el caso del 1.2 TSI de 86 CV y 1.6 TDI de 90 CV en el caso del Ibiza y que ya se comercializa en algunos países.
La marca dice funcionar muy bien con esta configuración, ya que el cliente busca deportividad pero hay quién no necesita esa potencia de más, y las ventas son un objetivo primordial.
¿Debería SEAT volver a ofrecer un acabado sport para estos motores tan pequeños? ¿Hasta cuando SEAT seguirá con esta política? ¿Se trata de esquivar la crisis?