Virginia llega temprano a la cuadra. Ahí, como de costumbre, la espera Cordat Z, un caballo de origen alemán de 700 kg y 1,84 metros de altura. Al verla, el animal saca la cabeza y le da la bienvenida. De golpe, un sonido extraño altera la cotidianidad habitual. Virginia se gira, y ahí en medio, como si fuera su casa, un León X-PERIENCE circula entre las cuadras.
¿Quién ganaría una carrera entre un caballo y un coche? Ese es el reto. Coche y caballo, frente a frente, se preparan para competir. Mientras Virginia pasa una esponja húmeda por el morro del animal, el conductor del León X-PERIENCE termina de limpiar la carrocería. Mientras la amazona comprueba los cascos del caballo, el coche verifica la presión de los neumáticos. Y así sucesivamente, hasta que Virginia toma las riendas del caballo y el conductor coloca a su altura el volante del vehículo.


