ENTREVISTA A DAVID GARCÍA, RESPONSABLE DE MANTENIMIENTO DE SEAT MARTORELL.

"Los héroes están en los hospitales, nosotros hemos hecho lo que sabíamos hacer"

En plena crisis sanitaria por la COVID-19, un pequeño equipo de 15 empleados de SEAT empezó a estudiar qué materiales y piezas podían usar para fabricar ventiladores de emergencia. En pocos días, ya eran 150 personas de todas las áreas de la compañía produciendo respiradores de emergencia para decenas de hospitales de toda España. David García, responsable de Mantenimiento de SEAT Martorell, en el proyecto desde el principio, nos cuenta su experiencia.

¿Cómo se materializó la idea de fabricar respiradores en SEAT?

El vicepresidente de Producción y Logística de SEAT, Christian Vollmer, decidió que teníamos que aprovechar la capacidad de SEAT y nuestra experiencia para ayudar de alguna forma en esta gran crisis sanitaria. Al ver que los hospitales tenían una gran necesidad de respiradores, nos unimos al proyecto de Protofy, el Hospital Germans Trias i Pujol y el Hospital Clínico de Barcelona. Nuestra misión era industrializar el prototipo de ventilador automático.

¿Por qué te implicaste en el proyecto?

Yo no soy médico ni enfermero, yo soy ingeniero. Solo podía ayudar generando equipos para los que salvan vidas y es lo que hemos hecho. Todos queríamos aportar nuestro granito de arena para ayudar a paliar los efectos de la COVID-19. Al principio, era un sinvivir. Era un gran reto el que teníamos por delante. Sabíamos que éramos capaces de hacerlo, pero temíamos no ser lo suficientemente rápidos. El equipo se desvivió y dio con soluciones ingeniosas como la de usar el motor del limpiaparabrisas, que garantizaba 2.000 horas de funcionamiento de los respiradores. Además adaptó la línea del subchasis del nuevo SEAT León en solo una semana para fabricarlos.


¿Qué ha significado a nivel personal?

Para mí es un orgullo haber participado en este proyecto, no lo olvidaré jamás. Ha sido un carrusel de emociones. La noche que salieron los dos primeros camiones cargados con respiradores sentí felicidad y alegría, pero también una enorme responsabilidad. Pero no me siento un héroe, los héroes están en los hospitales, nosotros hemos hecho lo que sabemos hacer.

¿Qué conclusiones sacas de este enorme proyecto?

Todavía no hemos tenido tiempo de pensar realmente en todo lo que hemos hecho, pero nos hemos dado cuenta de que tenemos un equipo con un talento extraordinario. La forma en la que hemos trabajado ha sido impresionante. Si somos capaces de replicar lo que hemos hecho estas semanas, podremos con cualquier otro proyecto de SEAT.